Como empresa multinacional, tu organización forma parte de una amplia red mundial de proveedores y consumidores. Es decir, te afecta directamente el fenómeno de la globalización, un fenómeno que ha transformado el mundo en un mercado interconectado e interdependiente.
Tómate un momento para pensar en los objetos que utilizas a diario, como tu ordenador, tu coche o tu ropa. Aunque te confecciones tu propia ropa, es muy probable que la tela que compres se fabrique en un país y se empaquete en otro. Tu ordenador o dispositivo móvil puede contener más de 12 piezas diferentes, cada una procedente de una fábrica distinta de otro país y ensamblada en otro lugar antes de llegar a tu tienda local.
Por ejemplo, Apple, una de las mayores empresas tecnológicas del mundo, se abastece de componentes procedentes de más de 30 países, entre ellos China, Filipinas, Alemania y Brasil.
Esta es la realidad de la globalización en acción.
Ya sea que decidas expandir tus operaciones a otros países o permanecer localmente, eres parte de una cadena de suministro global. Para desarrollar con éxito una estrategia global, hay que comprender las fuerzas macroeconómicas que impulsan la globalización y cómo afectan a las empresas en la práctica. Esto significa mantenerse al día de las últimas tendencias, cambios y retos de la globalización.
¿Qué es la globalización?
La globalización es un término que se utiliza a menudo en contextos políticos, sociales y económicos, y se gestiona a través de organizaciones internacionales como la Organización Mundial del Comercio (OMC), el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional y las Naciones Unidas. Sin embargo, el impacto de la globalización lo sentimos todos, no sólo los que están en posiciones de poder que debaten políticas fiscales o acuerdos de libre comercio.
En el fondo, la globalización se refiere a la creciente interdependencia de personas y bienes en el mundo actual. Es la visión de conjunto que rodea tu estrategia empresarial y abarca todos los aspectos de tus operaciones globales, desde la ampliación de tus procesos de fabricación hasta el establecimiento de oficinas, e incluso tus esfuerzos de localización y traducción.
Aunque el término "globalización" sólo surgió tras el auge del capitalismo industrial después de la Segunda Guerra Mundial, la historia de la globalización se remonta a las antiguas redes de comercio internacional, como las de la Ruta de la Seda. Las especias, las sedas, la madera y el oro se abrieron camino por todo el mundo, y con ellos llegaron nuevas lenguas, filosofías y cocinas.
Desde una perspectiva microeconómica, la globalización se refiere al contexto que utilizan las empresas para pasar de un producto o servicio de un solo país a uno multinacional. Como empresario, debes entender el concepto de globalización y cómo afecta a tu negocio, especialmente desde el punto de vista de la traducción y la localización, que pueden ayudarte a llegar con eficacia a un público internacional.
¿Cómo funciona la globalización?
Como empresa multinacional, la globalización exige considerar cuidadosamente diversos factores, entre ellos:
Estrategia de entrada en el mercado: Hay varias formas de entrar en un mercado extranjero, como la exportación, la concesión de licencias, la franquicia, la asociación, las fusiones y adquisiciones, las inversiones en nuevas instalaciones, etc. Identificar el mejor enfoque es crucial para tus objetivos empresariales y las condiciones del mercado local.
Marca global y localización: Para comercializar eficazmente tu marca y tus productos en diferentes mercados, debes determinar cómo (si es que quieres) modificar tu marca y tus productos. Esto incluye desarrollar una propuesta de valor de mercado global y equilibrar la capacidad de respuesta local con la integración global.
Cadenas de suministro: Expandirte a múltiples mercados exige asegurar el mismo nivel de servicio. Se trata de determinar qué modelos de transporte utilizar y comprender cómo pueden afectar a tu cadena de suministro la normativa comercial mundial, los mercados laborales, los aranceles y las barreras comerciales, así como otros factores internacionales.
Normativa: Entrar en nuevos mercados significa navegar por un nuevo conjunto de marcos jurídicos y políticas comerciales. Esto implica cumplir la normativa local y las políticas comerciales que rigen tu proceso de contratación, prestaciones, privacidad de datos, etc.
Traducción: Para llegar a tus mercados objetivo con eficacia, es necesario comprender las lenguas y los matices de las culturas locales. Esto requiere una estrategia de traducción integral que aborde las diferencias lingüísticas y culturales y que te ayude a comunicarte eficazmente con tus clientes.
¿Cuáles son los beneficios de la globalización para las empresas?
La globalización acerca a las personas y los bienes, y facilita el traslado de productos y personas de un lugar a otro. Los que abogan por la globalización sostienen que ésta puede llevar a unos niveles de vida más altos para los países en desarrollo, a un PIB más fuerte y a unos lazos globales más profundos a través del comercio internacional.
Desde el punto de vista empresarial, la globalización ofrece ventajas notables, como la capacidad de relacionarse con clientes y usuarios de todo el mundo, ampliando tu huella en el mercado y tus ingresos. La localización, uno de los subconjuntos de la globalización, implica adaptar tu oferta de productos y experiencias para que calen en el público local, una parte esencial de la expansión internacional.
Veamos el ejemplo de Amazon, una de las empresas globales más exitosas del mundo. Amazon opera en 58 países y cada día llega a más de mil millones de personas en Internet, algo que la convierte en la primera empresa de comercio electrónico en todos los países excepto China. La página de inicio personalizada de Amazon es un ejemplo excelente de cómo una empresa puede localizar sus ofertas para que calen en un público global.
Entre los beneficios de aplicar la globalización a tu empresa se incluyen:
El potencial de fuentes adicionales de ingresos
● Acceso a diferentes sistemas económicos y formas de hacer negocios
● La capacidad de llegar a una cultura extranjera de forma significativa
● Fomentar la confianza entre la empresa y los clientes más allá de las fronteras nacionales
● Acelerar la creatividad y la innovación
● La oportunidad de liderar el sector.
Al adoptar la globalización y la localización, las empresas pueden ampliar su alcance y establecer una presencia mundial, que les proporciona una ventaja competitiva en el mercado.
¿Cuáles son los retos de la globalización?
Aunque la globalización ofrece muchos beneficios, también presenta varios retos. Los avances tecnológicos han acelerado la globalización, con efectos negativos como la volatilidad de los mercados financieros, el cambio climático y la desigualdad de ingresos. El aumento del proteccionismo y la ideología populista también han provocado efectos dominó como el Brexit, la crisis financiera de 2008 y la gestión de la pandemia, que afectan a todos, no sólo a los ciudadanos individuales.
A nivel empresarial, gestionar una operación global es más difícil que dirigir una pequeña empresa local. A medida que aumenta el número de piezas móviles, rutas comerciales, personal, oficinas y políticas, también aumenta la probabilidad de tener problemas.
Algunos retos comunes de la globalización para las empresas incluyen:
● Construir un reconocimiento y una notoriedad de marca mundiales suficientes
● Gestión de la cambiante normativa de los distintos países
● Logística de la cadena de suministro y atención al cliente en distintos países y husos horarios
● Competir con marcas locales con una cuota de mercado consolidada
● Comprender las preferencias de los clientes en los mercados extranjeros
● Localización y traducción, que exigen abordar las diferencias lingüísticas y culturales.
Hacer frente a estos retos exige una estrategia global que tome en consideración las necesidades específicas de cada mercado y aproveche las últimas tecnologías y las mejores prácticas de globalización y localización. De este modo, las empresas pueden afrontar con éxito los retos de la globalización y establecer una sólida presencia mundial.
¿Cuáles son las mejores prácticas para la globalización?
Las marcas pueden incorporar la globalización a su estrategia de producto si adoptan buenas prácticas como:
- Crear contenidos con mensajes perennes: Las marcas deben incorporar mensajes universales que calen en los clientes de todo el mundo, a la vez que adoptan un enfoque localizado que tenga en cuenta las diferencias culturales y lingüísticas. Por ejemplo, Coca-Cola ha conseguido el éxito gracias a la estandarización de sus mensajes en torno a la felicidad, el disfrute y el compartir, al tiempo que ofrece variaciones en los sabores y envases locales.
- Gestionar la cadena de valor de la empresa: Las marcas deben asegurarse de que los valores de su empresa se alinean con sus objetivos principales y protegen su ventaja competitiva. Unilever, por ejemplo, emplea una estrategia transnacional, y contrata a directivos locales para dirigir sus operaciones e instalaciones de fabricación en el país, al tiempo que divide la empresa en función de la oferta de productos.
- Crear una marca reconocida mundialmente que defina sus propios conceptos: Las marcas deben desarrollar una marca global fuerte que pueda adaptarse a las preferencias locales. Starbucks ha logrado el éxito colaborando con empresas cafeteras locales y ofreciendo mezclas únicas que se ajustan a las preferencias gustativas locales, al tiempo que emplea la artesanía tradicional para construir tiendas que se adapten a las culturas locales.
- Realizar estudios de mercado minuciosos: Las marcas deben realizar estudios de mercado exhaustivos para comprender los matices culturales y lingüísticos y adaptar su oferta de productos en consecuencia. Esto incluye comprender las leyes, normativas y costumbres locales e identificar al público objetivo y sus preferencias.
- Invertir en localización y traducción: Las marcas deben invertir en servicios de localización y traducción para garantizar que sus mensajes y ofertas de productos resulten cultural y lingüísticamente adecuados para sus mercados de destino. Por ejemplo, traducir páginas web, material de marketing y descripciones de productos, así como adaptar los productos a las preferencias y normativas locales.
- Aprovechar la tecnología: Las marcas pueden aprovechar la tecnología para facilitar la comunicación global, la colaboración y la gestión de la cadena de suministro. Por ejemplo, el software basado en la nube puede permitir la colaboración en tiempo real entre equipos de distintos países, mientras que las plataformas de comercio electrónico pueden facilitar las ventas y la logística transfronterizas.
- Desarrollar un equipo internacional fuerte: Las marcas deben invertir en la creación de un equipo diverso y culturalmente sensible que pueda desenvolverse en las complejidades de los mercados mundiales. Esto implica contratar personal local con conocimientos lingüísticos y culturales, así como ofrecer formación y apoyo intercultural a los miembros del equipo.
- Asociación con organizaciones locales: Las marcas pueden asociarse con organizaciones locales para conocer mejor los mercados locales y ganarse la credibilidad del público local. Esto incluye asociarse con ONG locales, asociaciones comerciales y grupos comunitarios para apoyar iniciativas locales y establecer relaciones con las partes interesadas locales.
Si siguen esas prácticas recomendadas, las marcas podrán sortear los retos de la globalización y abrir nuevas oportunidades de crecimiento y expansión. Ya sea entrando en nuevos mercados o ampliando los existentes, una estrategia de globalización bien aplicada puede ayudar a las marcas a construir una fuerte presencia global y a triunfar en un mundo cada vez más interconectado.
Consigue el éxito mundial con las soluciones de traducción online de Hareword
En un mundo tan interconectado, la expansión global de tu empresa es esencial para el crecimiento. Sin embargo, enfrentarse a las complejidades de los mercados internacionales puede resultar desalentador, sobre todo por las diferencias lingüísticas y culturales. Ahí es donde Hareword puede ayudarte a alcanzar el éxito mundial y a construir una marca global sólida.
La colaboración con Hareword te permitirá agilizar tus esfuerzos de globalización y evitar costosos errores. Nuestras potentes soluciones de traducción online se han diseñado para ayudarte a conectar con clientes de todo el mundo, sin importar el idioma que hablen. Tanto si quieres entrar en nuevos mercados como ampliar los que ya tienes, Hareword puede proporcionarte la experiencia y la tecnología que necesitas para triunfar.
Si quieres saber más sobre nuestros servicios de traducción y cómo podemos ayudarte a alcanzar el éxito en todo el mundo, ponte en contacto con nosotros hoy mismo.